Afrontar la llegada de un hermanito

hermanito2

El primer bebé de una familia goza de sus padres en exclusiva durante un tiempo, recibiendo toda la atención y cariño sin fisuras. Sin embargo, con la llegada del segundo hijo, a menudo surgen celos porque los papás tienen que dividir la atención y además el nuevo bebé, al ser menos autónomo, es mucho más demandante. Esta situación a menudo crea inseguridad en los pequeños que es importante abordar para que no cojan manía a sus hermanitos y sobrelleven la situación lo mejor posible.

Cuando el segundo bebé todavía no ha nacido es importante hablarle al mayor sobre su llegada, animarle a participar en la elección del nombre, explicarle cómo será el parto (siempre ofreciendo la información que él demanda, con palabras sencillas adaptadas a su edad). Estos pasos le harán sentirse involucrado en el proceso.

Si por reorganizar el espacio prevéis que vais a tener que mover de habitación al mayor, es mejor hacerlo un tiempo antes de que nazca su hermanita o hermanito para que no se le junten todos los cambios a la vez. Los niños necesitan tiempo para acostumbrarse a los cambios y prefieren las rutinas. Haciéndolo de esta forma, no lo percibirá como una “bajada de estatus” relacionada con la llegada del bebé.

hermanito1

Después del parto, mamá tendrá que pasar mucho tiempo con el nuevo integrante de la familia. Es un buen momento para que el otro peque pase tiempo con su padre, haciendo actividades para “niños grandes”, en las que el recién llegado no puede aún participar por ser tan pequeño.

También es importante valorar la ayuda que pueda prestar en el cuidado del bebé, ayudándonos a secarle después del baño, a darle crema o pasándonos un pañal. En cualquier caso, no debemos forzar al mayor a que se involucre con su hermanito, sino dejar que fluya la relación fraterna.

Aunque el cuidado del recién nacido sea muy absorbente, es importante que la madre saque aunque sea unos minutos al día para jugar en exclusiva con el primogénito. Esos momentos le harán sentir especial y tenido en cuenta. Podemos aprovechar esos ratos para reconocer los sentimientos del pequeño, mostrándole nuestra comprensión: “¿Te duele que a veces, cuando quieres hacer algo conmigo, yo tenga que atender al bebé?”. Es posible que todo lo que necesite sea que le dediques un poco de tiempo para escucharlo y validar la mezcla de sentimientos que está viviendo con la llegada de su hermanito.

hermanito3

Shares

Shares